LA FIESTA INOLVIDABLE
El pasado 7 de diciembre la empresa Anilinas Colibrí festejó en Salguero Plaza su centenario de vida y vigencia de esta singular empresa familiar.
Exactamente cien personas fueron invitadas al festejo que se inició a las 21 hs hasta altas horas de la madrugada donde no faltaron la emoción, los reconocimientos, la diversión y las palabras justas de Daniel Andriano, quien comanda la empresa exitosamente junto a la que él denomina la Familia Colibrí, donde están incluidos personal, distribuidores, proveedores y familiares .
La fiesta se inició con la presentación formal de un proyección audiovisual de la trayectoria de la empresa que fue muy aplaudida por todos los presentes.
Imágenes de antiguos empleados, las balanzas que usaban muchos años atrás, la figura del inolvidable y entrañable don Juan Andriano,
Luego de la proyeccion Daniel Andriano agradeció a los presentes e inmediatamente comenzó a la entrega de placas a los empleados con mayor trayectoria en la empresa.
En primer lugar en recibir la placa fue el contador Mauricio Adef quien está en la empresa desde 1956, luego fue el turno de Alicia Sergenti con 48 años en la firma. Por último mencionó a Diana Prima con 34 años de permanencia. Todos ellos fueron ovacionados por los invitados
El clima fue tan cálido y emocionante que fue muy fácil sentirse a gusto entre la familia Colibrí
Un mago muy simpático hizo reir a carcajadas a los invitados, especialmente cuando éste le preguntó a Daniel Andriano quien era el más chistoso de Colibrí a lo que inmediatamente respondió que era su primo Horacio Losado. Fue un momento inolvidable y de jerarquía el que se vivió en ese momento. Trucos para todos los gustos que causaron gran admiración que se reflejó en los rostros sonrientes de los presentes: distribuidores de todo el país, proveedores, familiares y empleados.
No falto el baile, la gran torta las numerosas fotos, los chistes, los recuerdos, todo en un ambiente increíble.
Un momento de los tantos emotivos fue cuando Daniel Andriano dijo unas palabras contando brevemente la historia de Colibrí y enfatizó que cada empleado de Anilinas Colbrí forma parte, no solo de una familia sino de una empresa. Desde los comienzos siempre se los consideró y en épocas donde la tecnología desplazaba al hombre, se los fue redistribuyendo en otras áreas ya que para Anilinas Colibrí un empleado o un obrero es un ser humano y merece ser valorado. Finalizó agradeciendo emocionado a su esposa Cristina por el acompañamiento y “aguante” que le brinda día tras día
La recepción y la cena, fueron de lo mejor y con todos los detalles.
La revista Aquende quien tuvo el honor de ser invitada agradece profundamente a la familia que es Anilinas Colibrí. Si, es verdad fue una fiesta inolvidable que todos recordarán con mucho placer. Salud Colibrí, que tu vuelo siga expandiéndose por otros cien años más.
Jorge Alicata
No hay comentarios:
Publicar un comentario