BIENVENIDOS AL BLOG DE LA REVISTA AQUENDE (Chacarita, Colegiales y Villa Ortúzar)

PINTA TU ALDEA Y SERAS UNIVERSAL....
Blog dedicado a los barrios de Chacarita, Colegiales y Villa Ortúzar. Este blog es una extensión de la revista gráfica Aquende, que se edita hace 29 años ininterrumpidamente.
Para colaborar con notas en ambos medios o figurar en el listado de anunciantes mandar un mail a revista_aquende@yahoo.com.ar








viernes, 15 de marzo de 2013

Entrevista a Claudio Kappel



Entrevista a Claudio Kappel

No necesita presentación. El lector de Aquende lo conoce por demás. Es el responsable de que mes a mes cerremos la revista con una sonrisa. En una charla muy amena, nos cuenta todo  sobre sus comienzos, su presente y su futuro.

Por Daniela Méndez Casariego

-¿Podés contarnos cuándo te diste cuenta que querías dedicarte al humor gráfico?
-Desde chico supe que quería dibujar. Lo que sucedió es que pronto noté que necesitaba agregarle algo gracioso a lo que hacía, si no, no me daban muchas ganas.
-¿Siempre tuviste facilidad para el dibujo?
-Sí. Aunque después estudié y me perfeccioné.
-¿Y sentido del humor?
-Eso no sé…  creo que lo fui ganando con el tiempo.
¿Es necesario tener maña para el dibujo para llegar a ser humorista gráfico?
-Hay mucha gente que viene y me dice: “yo no agarré un lápiz en mi vida” pero en poco tiempo hace progresos espectaculares. La parte gráfica se puede aprender. Lo difícil es la parte creativa.
¿En tu trabajo es más importante la idea  que el dibujo o lo contrario?
El dibujo y la idea son una misma cosa, tienen que acompañarse. De todas maneras, para mí es más importante la idea. Un buen chiste funciona igual, aunque el dibujo no sea muy bueno. No pasa lo mismo al revés.
Creás chistes diarios desde hace 14 años. ¿Cómo hacés para no perder la inspiración?
Cada vez me cuesta más. Es difícil no repetirse. Las noticias son mi materia prima. Leo varios diarios por día, hasta que me surgen tres o cuatro ideas. Elijo la que más me gusta y la pulo. Esa es la parte más complicada. El dibujo sale solo.
En la actualidad hay muchos personajes jugosos en los medios: periodistas, políticos…  ¿Es un momento prolífero para los humoristas?
No más que otros. Todas las etapas políticas tienen su costado para explotar. Ahora parece haber mayor susceptibilidad. Hay que cuidarse porque enseguida te encasillan. Me ha pasado que un mismo chiste fue vivido como un homenaje en algunos medios y como una falta de respeto en otros.
¿Recibiste muchas presiones a lo largo de tu carrera?
Sí, por supuesto. Sólo una vez con este gobierno pero con los anteriores he recibido llamados de editores con miedo a posibles juicios.
¿Qué te generan esos límites?
Por un lado lo entiendo pero por otro me da bronca; sobretodo si el chiste es bueno. El humor siempre toca intereses; implica estar parado en la vereda de enfrente. El humor se ríe del poderoso.
¿El hecho de ser psicólogo te ayuda a la hora de analizar la realidad del país?
No. Quizás me ayudó a componer personajes. Pero nada más.
Trabajás en medios internacionales. ¿Cómo creas chistes para el público portugués o el español?
A ellos les está pasando lo que a nosotros nos pasaba diez años atrás. Un chiste de nuestra crisis del 2001 cuadra perfectamente en la realidad de ellos. De todas formas, hay bromas que acá funcionan y allá no. Por eso siempre trato de estar informado de la realidad del país en cuestión.
¿Hay un humor propiamente argentino?
Acá hay mucho humor político. En España también, pero en otros países no tanto.
Tenés la escuela desde el año 2000: ¿qué diferencias humorísticas notás en las nuevas generaciones?
Los chicos están más informados que antes. La tecnología tiene mucho que ver. Te hablan de igual a igual. Son muy veloces. Los adultos empiezan a dibujar como una forma de distracción pero pronto ven una posible salida laboral. Eso antes no pasaba.
Además del acceso a la información, ¿qué otros aportes positivos hace la tecnología a tu trabajo?
Es un antes y un después.  Cuando empecé en la revista Humor o en el diario, tenía que llevar los chistes personalmente. Se me iban dos horas diarias en viaje. Cuando apareció el mail… ¡magia!
-Me vienen a la mente muchos nombres de hombres que se dedican al humor gráfico pero no de mujeres. ¿Es un rubro particularmente masculino?
Sí. Hay una cuestión de género innegable. Quizás sea porque al hombre le cuesta menos reírse de sí mismo. Para reírme del otro primero tengo que saber reírme de mí. Igual, ahora hay más mujeres que antes. Podría nombrarte a cinco o seis…
Maitena es una…
Sí, lo de Maitena fue una explosión. Y hay otras no tan populares. Pero está bueno porque la mirada femenina es diferente.
¿Tenés alumnas?
Sí, muchas.
-¿Podés anticiparnos algún trabajo nuevo?
Tengo un par de tiras para chicos que me gustaría publicar. Yo hago el guión y otro dibuja. Además, quiero hacer un libro de humor sobre las nuevas tecnologías: redes sociales, diferencias generacionales, internet…
Colaboras con la revista Aquende desde sus inicios. ¿Alguna palabra que quieras dedicarle al lector que disfruta de tu trabajo desde hace tanto tiempo?
En estos 20 años me sentí muy cómodo. Por Jorge Alicata sé que mis chistes tienen en general buena recepción.  Es más, esta revista es la única que nunca me rebotó un chiste. Estoy muy agradecido.

No hay comentarios:

Publicar un comentario